Poco a poco vas
dejando tus caracoles
por toda la casa
caracoles diminutos que
reptan o insisten en
permanecer ahí
donde los has
dejado caer
sin darte cuenta.
Te recuerdo y me
enredo resbalando
me contigo
cuando tu
sonrisa me abre
los brazos y
la intensidad de
los eclipses solares
me atrapan con sus
pétalos.